Comienza la actividad en el M1000 de Roma y es bueno recordar los grandes logros del tenis argentino en la capital italiana. Y es imposible dejar de lado el tremendo torneo que jugó Alberto “Luli” Mancini en 1989, donde se llevó el torneo derrotando nada menos que a Andre Agassi en la final.
Mancini era de esos jugadores que nadie quería enfrentar en canchas lentas. Una roca fisicamente, era capaz de estar horas y horas golpeando con mucha fuerza la bola. Eso padeció Agassi, número 5 del mundo en ese momento y que terminó destrozado en el último set, agotado de tanto correr. La victoria del argentino (25 del mundo al comenzar la semana, ese año fue top ten) fue por 6-3 4-6 2-6 7-6 6-1 y en este torneo también derrotó a un muy joven Pete Sampras.