Luego de varias temporadas ausente en la gira de canchas lentas, en 2019 Roger Federer tomó la decisión de volver a disputarla, buscando llegar de la mejor manera a Roland Garros.
Su tenis se mostró muy bien a Roma, jugando un tenis ofensivo y buscando dominar. Claro que tuvo que pasar algunos sobresaltos, cómo por ejemplo ante Borna Coric en octavos de final, donde levantó un par de puntos de partido en contra, con el público totalmente extasiado por la tensión del partido y pudiendo ver al gran ídolo ganar nuevamente.